Los quemadores son suplementos que ayudan a disminuir la grasa acumulada. Poseen un gran aporte de nutrientes e ingredientes naturales que aumentan la energía. De esta manera se estimula el metabolismo suprimiendo el apetito. Utilizarlos brindan gran ayuda para que el metabolismo elimine las grasas del cuerpo.
¿Cómo usarlo correctamente?
Es importante saber que cada suplemento para que funcione y haga su labor correctamente, debe estar acompañado siempre por ejercicio físico y una dieta saludable. Por ello toda persona que lo está usando debería mantenga un plan alimenticio bien guiado, para que al finalizar el uso del producto siga comiendo de forma adecuada, es decir, el consumo de los suplementos está perfectamente idealizado para un cambio de hábito alimenticio, no sólo para un intervalo de tiempo.
Este tipo de suplementos aumenta el calor corporal del organismos (termogénesis). Utilizan la grasa acumulada como combustible, hacen que la quema de grasas sea mucho más efectiva.
no contienen sustancias estimulantes. Emplean las grasas como fuente energética para el organismo, no las guarda.
Acido Linoleico Conjugado. Reduce la grasa corporal a la vez que aumenta la masa muscular, disminuye los niveles de colesterol, mejora el sistema inmune y actúa como antioxidante. Bloquea el transporte de las grasas hacia las células adiposas.
Bloqueadores de carbohidratos y grasas
Se conoce como absorbe – grasas. Evitan que el cuerpo absorba la grasa durante la digestión. Esta actividad se lleva a cabo principalmente en el intestino y en el estómago.
Diuréticos
Eliminan el agua y el sodio acumulado en nuestro cuerpo a través de la orina.
Disminuyen los depósitos de grasa
Mejoran el ratio grasa/masa muscular, es decir, la proporción entre la grasa y la masa muscular, a través del aumento del metabolismo.
Genera un aumento de energía
Predispone al organismo para la actividad física mediante un aumento del aporte de sustratos energéticos al músculo.
Algunos de ellos contiene carnitina, por lo tanto bajan los niveles de colesterol en sangre, mejora la circulación y disminuye los riesgos de ataque cardiacos.
Incrementa el gasto energético basal
Se refiere a la energía que requiere el organismo para realizar actividades fundamentales en reposo y ayunas. Esto depende del tamaño del organismo (peso, talla), de su composición (parte magra y grasa) y de la edad).